El gobierno del Reino Unido ha subrayado recientemente su compromiso de salvaguardar la libertad religiosa en el país frente a la represión transnacional de la China comunista.
El Ministro del Interior británico, Lord Hanson de Flint, afirmó la postura del Reino Unido el 20 de marzo, en respuesta a una pregunta de Lord Alton de Liverpool, quien preguntó si el gobierno había realizado alguna evaluación sobre los riesgos que enfrentan los practicantes de Falun Gong y los artistas de Shen Yun en el país y si hay un plan para abordar el tema.
«El Gobierno está comprometido a promover y proteger el derecho a la libertad de religión o creencias, incluida la protección de los derechos de los practicantes de Falun Gong y su grupo de actuación, Shen Yun», escribió el Ministro del Interior.
Evaluamos continuamente las posibles amenazas en el Reino Unido y nos tomamos muy en serio la protección de los derechos, las libertades y la seguridad de las personas en el Reino Unido. No toleraremos ningún intento por parte de ningún estado extranjero de intimidar, acosar o perjudicar a personas o comunidades en el Reino Unido.
Falun Gong, también conocido como Falun Dafa, es una disciplina espiritual que se caracteriza por ejercicios de meditación y enseñanzas basadas en los principios de verdad, compasión y tolerancia.
La práctica se hizo enormemente popular en China a finales de la década de 1990, y las estimaciones oficiales situaban el número de practicantes en más de 70 millones en ese momento. Temiendo que las enormes consecuencias de esta práctica pudieran amenazar su dominio, el Partido Comunista Chino (PCCh) lanzó una campaña de erradicación en julio de 1999, arrojando a los practicantes a prisiones, campos de trabajo y otras instalaciones.
Desde entonces, millones de personas han sido detenidas, cientos de miles han sido torturadas mientras estaban encarceladas y un número incalculable ha sido asesinado, según el Centro de Información de Falun Dafa.
El PCCh ha exportado sus tácticas represivas contra Falun Gong al extranjero. En septiembre de 2024, hombres chinos no identificados atacaron a practicantes de Falun Gong en un evento que celebraba el Festival del Medio Otoño en la ciudad de Nueva York, lo que provocó la condena de los legisladores locales.
Shen Yun Performing Arts, con sede en Nueva York, fue fundada por practicantes de Falun Gong en 2006, con la misión de revivir la antigua cultura china que prevalecía antes de que el PCCh tomara el poder en China. La compañía de danza clásica china ha enfrentado docenas de amenazas de bomba y de muerte contra los teatros donde actuó durante el año pasado. Se cree que las amenazas están vinculadas al régimen chino.
Hanson dijo que el gobierno británico tiene un «amplio conjunto de poderes para contrarrestar la interferencia extranjera, incluidas aquellas acciones que equivalen a represión transnacional».
«Seguiremos utilizando todas las herramientas a nuestra disposición para mantener a la gente segura», dijo.
El ministro del Interior también citó un anuncio reciente del ministro de Seguridad británico, Dan Jarvis, diciendo que habrá nueva capacitación disponible para los oficiales y el personal de policía de primera línea para comprender mejor las «amenazas que presentan las potencias extranjeras».
«Esta capacitación aumentará la capacidad de las fuerzas del orden para detectar actividades delictivas, que pueden ser dirigidas por el Estado, y fortalecerá la confianza pública en la respuesta del Reino Unido», escribió Hanson.
El anuncio inicial de Jarvis a principios de marzo no vinculó específicamente el entrenamiento con China. En cambio, se pretendía abordar las amenazas planteadas por el régimen iraní.
«El régimen iraní está atacando a los disidentes. Y está atacando a los medios de comunicación y a los periodistas que informan sobre la violenta opresión del régimen», declaró Jarvis ante el Parlamento británico en aquel momento.
En Estados Unidos, la Comisión de Libertad Religiosa Internacional identificó al régimen chino como uno de los peores violadores de la libertad religiosa en su último informe anual publicado el 25 de marzo.
El informe insta al gobierno de Estados Unidos a coordinarse con sus socios internacionales para sancionar a los funcionarios chinos responsables de violaciones de la libertad religiosa, incluidos aquellos funcionarios que llevan a cabo represión transnacional contra minorías religiosas.
«Las autoridades chinas intentaron reprimir a los activistas y disidentes de la diáspora mediante castigos colectivos, como intimidar a sus familias en China, desalojarlas forzosamente, prohibirles viajar y emprender acciones penales», afirma el informe.
Artículo publicado originalmente en The Epoch Times con el título: «UK Government Stresses Protection of Falun Gong Practitioners Against Potential China Threats»
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