FRANKFORT— Colores brillantes, historias conmovedoras, composiciones emotivas: Shen Yun Performing Arts da vida a la cultura china de 5,000 años de antigüedad, inspirada en lo divino, y que en gran medida fue destruida u olvidada tras décadas de gobierno comunista. El exministro de Finanzas de Hesse, Michael Boddenberg, al igual que muchos otros espectadores antes que él, expresó su admiración por el valor de los artistas, pues detrás de su causa hay un llamado a una China libre.
Del 5 al 9 de febrero, uno de los ocho grupos artísticos de Shen Yun se presentó en el Jahrhunderthalle de Frankfort del Meno. Este conjunto de danza clásica china, con sede en Nueva York, se encuentra actualmente en una de sus giras mundiales más grandes hasta la fecha.
Michael Boddenberg, exministro de Finanzas de Hesse y miembro del Parlamento Estatal alemán desde 1999, asistió a la función del 8 de febrero.
«Un gran espectáculo, una coreografía impresionante, bailarines increíblemente dinámicos, entusiastas y comprometidos», comentó. «Una gran orquesta, una magnífica simbiosis entre la música occidental y china, entre la tradición y la modernidad. Estoy muy entusiasmado».
El oriundo de Frankfort añadió: «Somos, por supuesto, una ciudad internacional y nos complace recibir a artistas de todo el mundo. Pero hoy fue una experiencia única. Viajo mucho, incluso en el ámbito cultural. Lo de hoy fue realmente especial».
Con sede en Nueva York, Shen Yun tiene la misión de revivir los 5,000 años de civilización china y compartir con el público la China de antes del comunismo.
El Sr. Boddenberg afirmó que Shen Yun fue «muy valiente al abordar este tema y difundir este mensaje en todo el mundo».
«La tradición y la modernidad no siempre van de la mano cuando la modernidad, es decir, la actualidad, una dictadura comunista, prohíbe muchas cosas», agregó.
El Sr. Boddenberg mencionó además que es una persona religiosa y que le preocupa la persecución religiosa en China bajo el régimen comunista. Elogió a los artistas de Shen Yun por destacar esta realidad.
«Me alegra vivir en un país libre», dijo. «Pero también observo con preocupación a algunos países del mundo donde las personas son oprimidas por sus creencias, por sus orígenes, por la libertad que quieren alcanzar. Aún quedan muchos mensajes por transmitir, y por eso el trabajo que están haciendo aquí es extraordinario».
Algunas de las piezas de danza están ambientadas en la China actual y basadas en hechos reales. Representan a personajes que se aferran a su fe y tradiciones a pesar de la opresión, abordando la persecución religiosa que aún continúa.
El régimen comunista persigue a quienes practican Falun Gong, una disciplina espiritual tradicional basada en los principios de Verdad, Compasión y Tolerancia.
Los practicantes son encarcelados y torturados, y algunos son asesinados dentro de la industria estatal de sustracción forzada de órganos: sus órganos son extraídos sin su consentimiento para ser utilizados en trasplantes médicos. Muchos artistas de Shen Yun practican Falun Gong; algunos han experimentado la persecución en carne propia o tienen familiares que aún la sufren.
El Sr. Boddenberg cree que los artistas de Shen Yun pueden lograr mucho.
«Creo que lograrán convencer a muchas personas, no solo con su gran actuación artística, sino también con su mensaje», afirmó.
Se dirigió directamente al elenco: «Solo quiero decir gracias. Tengo una vaga idea de cuánto trabajo hay detrás, de cuánto esfuerzo y sudor, y de cuánto compromiso personal. Y a veces, como decimos en Alemania, hay que vencer los propios demonios internos, porque los bailarines tienen que practicar día y noche para poder hacer todo esto físicamente. Así que tengo un gran respeto por este logro».
Su deseo para el nuevo año es «que el mundo se vuelva un poco más pacífico».
«Todos estamos llamados a hacer nuestra parte. Aunque solo signifique venir aquí, escuchar y tal vez irse a casa esta noche con el pensamiento de que cada uno de nosotros tiene una responsabilidad en lo que sucede en este mundo. Y en ese sentido, gracias nuevamente a todos los que hicieron esto posible», concluyó el Sr. Boddenberg.
Inmersión en la antigua China
Peter Gaj, un empresario en el campo de la investigación, también quedó impresionado por el viaje a la antigua China presentado por Shen Yun. Viajó al Jahrhunderthalle con su madre y seis familiares y amigos. Después de la función, estaba radiante.
«Tuve una noche maravillosa con familia y amigos», dijo. Se sintió «inmerso» en las historias de danza.
«Durante dos horas, estás un poco en China», comentó, añadiendo que se sintió inmerso en «otro mundo» en el que las preocupaciones y el estrés desaparecen.
Su madre, Ursula Gaj, quien trabajaba como contable y ahora está jubilada, dijo que le impresionaron los movimientos de los bailarines y también la música interpretada por la orquesta. «Algo tan suave y hermoso», comentó.
Para el empresario, quien no vio ni un solo asiento vacío en el teatro agotado ese día, una cosa es cierta: volverá el próximo año—»si todavía podemos conseguir boletos».
Reporte de NTD y Susanne Ausic
The Epoch Times considera a Shen Yun Performing Arts como el evento cultural más importante de nuestro tiempo y ha cubierto los cometarios del público desde la creación de la compañía en 2006.
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